Mis aventuras con la empleada doméstica (1)

Participan: un adolescente de 14 años.

Capitulo primero
Esta historia es real, y me paso hace muchos años atras.
Desde muy pequeño siempre ha habido una criada en la casa. Cuando tenía 10 años
mis padres contrataron a una muchacha, a quien llamaremos Asela, para trabajar.
A medida que pasaron los años se fui forjando amistad y confianza con ella.
Sin embargo cuando fui llegando a la pubertad empecé a tener curiosidad por
el sexo. A la edad de 14 años mi forma de ver a Asela cambio.
La empeze arrescabuchar por el ojo de la cerradura cuando se bañaba en la ducha
que habia en el garaje de la casa y veia que tenia muchos pelos negros en su vagina.
Ella era pequeña, media como 5 pies 2 pulgadas, sin embargo tenia unas caderitas
bonitas, un par de lindas piernas, tetas formaditas, una cinturita delgadita y un
culito despampanante. En cuanto la veía con ropa que le ajustaba el culo no paraba
de pensar en ella y seguirla con la vista por toda la casa.
El garaje tenia un cuarto en el segundo piso que era donde ella vivia y dormia
durante la semana. Tenia todos los Domingos libres y salia con un muchacho que
despues se convirtio en su esposo.
Yo me hacia el tonto y visitaba su cuarto despues que ella se retiraba a
descansar, muchas veces cuando subia la encontraba toda tapada con una sabana
blanca y leyendo un libro de bolsillo. Me fijaba que a veces tenia los pies
como engarrotados y toda ella se veia tensa.
Un Domingo cuando ella salio y mis padres no me vieron subi a su habitacion y la
registre encontrando el librito escondido entre unas toallas, se llamaba la "Vida
de una Princesa Rusa" todos los Domingos cuando ella no estaba subia a leerlo y
por el descubri todo lo relacionado al sexo y las distintas cosa que se podian
hacer, entre familiares, mujer con mujer y hombres con hombres etc......Fue cuando
se me levanto el velo de la inocencia y empeze a darme cuenta de muchas cosas que
pasaban y que ahora tambien veia.
Por el me di cuenta lo exitada que Asela se ponia cuando lo leia pues a mi me
pasaba lo mismo y me hacia muchas pajas leyendolo, ahora cuando yo la visitaba
por las noches para "hablar" me fijaba que debajo de la sabana Asela tenia tambien
lo pezones paraditos, veia sus grandes areolas obscuras y pezones gruesos pero no
muy larguitos, y el bulto obscuro de su pubis se le delineaba pues ella se acostaba
desnuda. Yo creo que lo hacia para que mientras leia el libro con una mano poder
meter la otra entre sus piernas para tocarse su papayita y hacerse una paja.
Me fijaba con cuidado las partes del libro que la excitaban mas y despues las leia,
asi me fui dando cuenta que le gustaba la dominacion.
Fui cambiando la forma de hablarle y le demandaba cada dia mas, note como poco a
poco asumia una posicion sumisa ante mi. Mi madre me regaño varias veces por el
trato rudo, pero yo sabia lo que buscaba y queria con ella.
¡Cuando vas a hacerme la puta cena, tengo hambre! le gritaba.
¿Qué le apetece cenar? me contestaba bajando sus ojos.
¡Mírame cuando te hablo, Asela! – le decia.
Yo ya media en aquel entonces 5'8 pulgadas y ella tenia que levantar su rostro para
poder mirarme.
Sí, sí… Perdona, me contestaba y empalidecia ante el severo tono de mi voz.
Entonces la cogia por el brazo y riendome le azotaba las nalgas un par de veces,
diciendole que habia sido muy mala.
Otras veces le ponia la mano bajo la barbilla y se la acariciaba dandole las gracias
por cualqier cosa que hubiera hecho.
Poco a poco se acostumbro a sentir mis dos mis manos sobre su cuerpo como castigo o
agradecimiento.
Todo las Sabados Asela lavaba su ropa a mano en el fregadero de atras de la casa,
alli no habia mucho espacio entre el fregadero y un muro que separaba nuestra casa
de la otra casa atras de nosotros. Empece a visitarla cuando ella se encontraba
lavando y cuando tenia metido los brazos en el fregadero llenos de agua y espuma
yo le pedia permiso para pasar por detras de ella y lo hacia lentamente pasando
el frente mio pegado a su cuerpo, tocando y rozandole con mi verga parada por todo
su culito y mi pecho toda su espalda. Se lo hacia dos o tres veces y al final le
daba unas nalgadas jugetonas.
Cuando mis padres salian por las noches yo me ponia a ver en la television de la
sala mis programas favoritos, sentado y meciendome en un sillon grande.
Unas semanas despues de haber empezado a rozarme con Asela y de seguir visitandola
en su cuarto ella se me acerco antes de subir a su habitacion y se puso a conversar
conmigo del programa americano que estaba viendo en ese momento.
Despues de un rato de jugar con mi pelo y hablandome se sento en mis piernas de lado
y me paso un brazo por atras de mi cabeza mientras bajaba el tono de su voz aunque
los dos estabamos solos. Empezo a hablarme cerca del oido diciendome lo sola
que se encontraba en la ciudad y como estrañaba a su famila y pidiendome perdón
por si se portaba mal conmigo.
Asela tenia en ese entonces 21 años de edad y no habia tenido una educacion formal
en su niñez en el campo, por lo cual a mis 14 años le podia hablar de muchas cosas
que yo habia leido o visto y que a ella le gusta saber.
Esa noche meciendome yo en el sillon y hablandonos bien bajito Asela se durmio en mis
brazos, cuando se desperto a la hora me agradecio mi gentileza con un suave beso en
la mejilla antes de subir a dormir. Esa noche no la fui a visitar me quede sintiendo
sus labios en mi mejilla toda la noche.


Capitulo Segundo
Pasaron varias semanas, yo siempre esperaba a que ella leyera un poco de su librito
antes de subir a su cuarto y me ponia a conversar estando ella debajo de la sabana.
Me sentaba a la mitad de la cama a la altura de su cintura y mirandole la cara le hablaba
de cualquier cosa que ella quisiera sin dejar de mirar su pecho que a veces subia y
bajaba agitadamente debido a la lectura que habia hecho anteriormente.
Cuando me retiraba a dormir pasaba un brazo por arriba de ella y me acercaba a darle
un besito de despedida que noche tras noche se acercaba mas a su boquita y que yo notaba
la agitaba, pues ella nunca sabia cuan cerca de sus labios la besaria esa noche.
Un dia diciendole lo cansado que me encontraba debido a un juego de pelota en mi colegio
le pedi permiso para acostarme a su lado por fuera de la sabana y ella nerviosamente
me lo permitio hechandose hacia la izquierda, pero quedamos bien pegaditos por ser la cama
para una sola persona. Yo haciendome el cansado me puse de lado hacia ella y me estire
quedando ella boca arriba y yo a su lado pegado a ella por todo el cuerpo sintiendo sus
palpitaciones, le dije que iba hechar un sueñito y que no se molestara que siguiera leyendo.
Por supuesto que no me dormi, sentia su respiracion mientras la pobrecilla trataba de leer
a los diez minutos le pase el brazo derecho por debajo de sus tetitas y ella dando un salto
trato de apartarme, cosa que yo aproveche y le pase mi pierna derecha por arriba de las de
ella y deje descansar mi rodilla abajo mismo de su pubis sintiendo lo bellos atraves de la
sabana.
Al tiempo senti como los dedos de ella se acercaban a su vagina y empezaba a pajearse
tratando de no hacer ningun movimiento para no "despertarme" El cuerpo caliente de
Asela y el saber lo que estaba haciendo me fue exitando y haciendo que mi verga se
empezara a parar pegada como estaba a su muslo. Con disimulo me vire quedando boca arriba

tambien y con una ereccion descomunal como nunca en mi vida la habia sentido.
Asela al yo virarme boca arriba se tuvo que poner de lado mirando hacia mi para no caerse y
entonces aparentamente se fijo en mi verga parada pues senti como gimio y movio su mano de
abajo de la sabana, delicadamente la acerco a mi verga. Yo llevaba puesto unos shorts bien
flojitos por lo cual ella pudo meter su mano y agarrame le pinga suavemente, la tocaba con
mucha delicadeza de los huevos hacia la cabeza como cogiendole tamaño y tambien el grosor
que para mi edad no estaba nada mal especialmente al sentir otra mano que no fuera la mia
tocandola y apretandola nerviosamente.
No pude resistir mas y me vine abundantemente en su mano con grandes y fuertes chorros de
leche. Entonces haciendome el dormido me incorpore y para despedirme le di un beso en sus
labios, ella excitada por lo sucedido abrio su boquita y su lengua salio a buscar la mia,
su lengua rosadita, al asomarla hacia que yo deseara con locura poder tomarla en mi boca
y chuparla hasta el cansancio. Yo como medio dormido abri mi boca y senti como su lenquita
busco y se enrollo con la mia.
Su mano mojada con mi leche la metio entre sus piernas y se pajeo furiosamente hasta
que se mojo toda de la acabada tan rica que tuvo. Me levante y me fui rapidamente pues
oimos como mi madre me llamaba creyedo que yo me encontraba afuera hablando con mis amigos
como a veces solia hacer.

Si gusta la parte final sera pronto.
Opiniones y comentarios
[email protected] Autor:Lothario