Cambio Cambio… para mejorar, para demostrar. Junto a la realidad y con mi gente. Con fuerza y esperanza. Teniendo en cuenta los errores del pasado. Y con la mirada en alto. Cambio… con las lágrimas que derramaron para mí. Por la sangre que no se desperdiciará. Todo el tiempo que se escurre entre mis manos. Gentes que se fueron para nunca volver. Dando señales de que la vida nunca se repite. Cambio… por esa calida tarde en la que abrí los ojos. Por ese frío invierno en el que me los cerraron. Para soportar la melancolía del otoño que me amenaza eternamente. Para renacer con la primavera que abraza al mundo. Y para que el ciclo no deje de ser recuerdo, pero que tampoco se repita. Cambio… para ser más justo y menos hipócrita. Acabando con las ganas que me invaden de volver al pasado. Para darle la espalda a ese espectro antiguo que desea devorarme. Por el agua que recorre mi piel y se vuelve sangre al sentir mi corazón. Bien sabiendo que no volveré a ser el mismo y para propio bien. Cambio… por esas sonrisas que jamás retuve. Para apartar todo el odio que se alojó como una espina dentro mío. Sin que fuera necesario que me lo dijeran, pero tampoco por diversión. Por esos huesos que se partieron con sufrimiento. Para honrar la carne familiar desgarrada. Cambio… al igual que todos los demás. Por miedo, necesidad u obligación. Quizá sea la solución a todos los problemas de ser humano. O solo una forma de retrazar lo inevitable. Espero que cuando el tiempo me lo diga, no sea demasiado tarde. Mr. Coyote