Zuma, un pequeño cachorro labrador barón de 6 años humanos, pelaje café oscuro, ojos amarillos y un collar azul. Aunque la palabra "pequeño" no seria la que usarías para describirlo físicamente , a simple vista lo primero que cualquiera notaria es que detrás de el hay 2 enormes esferas mas grandes que una pelota de boliche cada una, son sus testículos; suaves y sudorosos, que revotan de arriba abajo a cada paso y desprendiendo su fuerte escancia varonil por donde pasa. La punta de su gran pene se ve asomándose por su vaina igual de grande. Siempre que camina todo su paquete se agita y se menea involuntariamente aun si el no quiere. Es un chico lleno de energía y entusiasmo con ansias de ayudar a los demás como salva vidas. 
Un día como otro, andando por ahí, Zuma se detiene a leer un poster que le llamo la atención que estaba pegado en la ventana de una tienda,  "Únete a la Paw Patrol, ayúdanos a salvar a todo el mundo", la información abajo habla sobre un grupo de cachorros que ayudan las personas, buscan gente que los ayude y cachorros para el equipo principal. Es perfecto para Zuma, el siempre ha querido estar en un grupo como ese. Además, Rocky, uno de los perros en el poster, le pareció bastante lindo a Zuma, aunque en la foto era el único que solo se le veía de cintura para arriba.
Zuma va corriendo a su casa (con sus bolas agitándose de un lado a otro golpeando con ellas sin querer a las personas) y prende su computadora para buscar la información de la Paw Patrol. Tiene suerte de justo sera mañana cuando reciben a los participantes.
A la hora y en el sitio, Zuma llega temprano  y ve una gran fila de perros que quieren formar parte de la Paw Patrol, muchos están siendo rechazados y los otros aceptados pero ninguno para los principales. Al entrar en el edificio, es recibido por 2 de los 3 perros que parecían en el poster. Zuma quería ver a Rocky pero solo estaban Chase y Marshall, Chase es un pastor alemán con un traje de policía, un collar gris con una placa de policía, una gorra con una placa con pata dibujada, ojos café, pelaje café claro y por arriba oscuro y un gran trasero un poco mas grande que el de un caballo el cual parece que esta castigando la silla en la que esta sentado. Y Marshal; un dálmata de ojos azules, con un traje y sombrero de bombero, un collar amarillo con una flaca con un fuego y sus grandes bolas se ven por debajo de la mesa (pero no tan grandes como las Zuma, ni de cerca).
Marshal: hola, toma asiento.
Ambos canes no pueden evitar ver las bolas de Zuma. Sobre todo Chase, quien ni siquiera disimula, las mira directamente casi babeando.
Zuma: hola. Pensé que eran 3.
Cuando Zuma se sienta, la silla se rompe de inmediato por el peso de sus bolas. En el piso, Zuma se sonroja un poco y dice: lo siento mucho, no era mi intención.
Marshall se ríe un poco y Chase dice: tranquilo, ambos rompimos unas cuantas antes de empezar. Sobre Rocky, el normalmente no esta para este tipo de cosas.
Zuma: bueno, gracias por entender.
Marshall: no te preocupes, podemos hacer las pruebas físicas en lo que el conserje trae otra silla.
Chase presiona un botón de su teléfono y se escucha una voz diciendo: déjame adivinar ¿otra vez?
Chase: jeje si, pero esta vez no fuimos nosotros.
voz: esta bien, la dejare en 20 minutos
Marshall y Chase: graciaaaas.
Chase: síguenos.
Ambos se levantan y se van caminando a las puerta de cristal de atrás seguidos por Zuma. A cada paso que dan, las grandes nalgas de Chase aplauden al ritmo de sus pasos y su olor se desprende al caminar, un olor fétido que dejo noqueado a varios de los perros que vinieron antes, pero para Zuma no es mas que una agradable brisa. Es una larga caminata, en la que los 2 canes charlan de sus cosas y de vez en cuando le comentan a Zuma sobre cosas importantes del grupo si lo llegan a meter al grupo.
Marshall: lo primero son las pruebas físicas básicas.
Los 3 llegan a un gimnasio con una pista para carreras dentro del edificio.
Chase: primero 20 vueltas en menos de 5 minutos.
Zuma: eso es fácil.
Zuma se estira, con cuidado de no lastimar sus grandes bolas y su pene, luego de eso empieza a correr agitando sus bolas como si las leyes de la gravedad desaparecieran en su entrepierna.
Chase: hey... son bastantes grandes.
Marshall: si, incluso diría que podría con Rocky.
Chase: tampoco son tan grandes, es mas para mi tamaño.
Marshall: oye! nadie puede tocar tu apestoso culo sin mi permiso.
Chase: aaaawww... ayer fue noche de burritos, alguien me mando una caja llena. llevo aguantando los gases desde la mañana para ti.
Marshall: quien crees que te los mando? se como te pones con los de carne de cerdo jeje.
Zuma termina las vueltas casi rompiendo el tiempo récord de 2 minutos 25 sin jadear o respirar fuerte.
Chase: perfecto, la mayoría falla en la primera prueba.
Marshall: todavía faltan unas cuantas.
Zuma: cualquiera puedo completarla.
Las pruebas pasan; resistencia, fuerza, vértigo, aguante, flexibilidad, respiración, medicas y el mas difícil de todos, manejo de espacios serrados, en el cual, las bolas de Zuma apenas pasaban por esa caja metálica llamada "ratonera" usada en las pruebas físicas de los bomberos. Zuma esta muy acostumbrado a moverse con ese gran obstáculo a todos lados. 
Chase: eso fue perfecto, eres el único que ha logrado pasar todas las pruebas, sin duda pasaras a formar parte del grupo.
Marshal: ya solo faltaría ver a que zona te gustaría ir.
Zuma: pues me gusta mucho la playa, se como dar respiración boca a boca y esas cosas. Tome varios cursos  de salva vidas.
Marshall: genial, bueno, nosotros tenemos que seguir haciendo las pruebas, ve al ascensor y sube a cuarto piso, ahí está la ropa, busca la de la playa.
Chase: espéranos en el quinto piso, hay tele, computadoras, comida, aire acondicionado, etc tardaremos como unas 2 horas en terminar las pruebas,
Zuma: esta bien, estoy emocionado por empezar a salvar a la gente.
Chase: nosotros igual.
Chase y Marshall se marchan agitando sus partes y Zuma se va al ascensor (por alguna razón el ascensor es enorme)  y pone el piso que le dijeron. 
Marshall: me agrado este chico, parecía que estaba muy interesado en Rocky.
Chase: y quien no? es muy lindo, aunque creo que deberíamos mostrar su cuerpo completo en los posters y la pagina web.
Marshall: la gente creía que era una pagina porno de cachorros por nuestros tamaños, tu y yo lo podemos ocultar un poco pero había mucha gente caliente entrando al sitio antes de taparlo a el.
Chase: si hacemos esas cosas y técnicamente tu y yo somos cachorros... ¿verdad? es complicado todo eso de los años perro humano.
Marshall: pero ellos no lo saben y yo tampoco tengo claro todo eso, se que a ciencia cierta Rocky si es un niño.
Chase: cierto. Que aburrimiento seguir las entrevistas, al menos faltan pocas.
Marshall: hey, a mi me gusta cuando notan mis bolas por debajo de la mesa.
En el cuarto piso hay muchas trajes similares a los de antes, Zuma busca el traje de playa y toma el que mas le gusto; un casco naranja con una placa de una pata en el centro, una placa para su collar con un ancla y un chaleco naranja con una especie de caja en la parte de atrás. El traje también tenia parte trasera pero por 2 enormes razones eso nunca quedaría bien.
Zuma vuelve al ascensor con su nuevo traje puesto y el cree que presiono el quinto piso pero puso el sexto por error.
En el sitio, se encontraban las mismas cosas que le mencionaron antes, por lo que el perro no pensó que estuviera equivocado con el piso. Por alguna razón, el sofá, silla y una nevera, eran mas grande de lo usual.
Zuma enciende la tele y se acuesta boca arriba en el borde del sofá con su cabeza en el reposa brazos y con sus grandes bolas sobre la suave tela, el que ocupa 3 asientos completos para el solo, 1 para su cuerpo y 2 para sus bolas. El sofá no tiene patas, en su lugar tiene una base de metal muy resistente, echa para algo muy grande y pesado al igual que la silla.
Media hora después, se escucha como se activa el ascensor seguido una fuerte peste que ni el aire acondicionado de la sala puede dispersar. En cuanto el ascensor llega al piso y se abre la puerta, la peste se  pone mucho peor. Se estuvo acumulando mientras el ascensor mientras subía y se libero llenando la habitación que no tenia ventanas.
Zuma olfatea con ganas, nunca antes había olido una peste tan fuerte. A zuma le encanta la peste de los otros animales sobre de los perros, el siempre disfruta olfateando los traseros de otros perros, lo que por suerte para el, eso algo normal entre perros, por lo que nunca fue visto como algo raro que se tomara su tiempo con su nariz entre las nalgas de un perro, cosa que a Zuma le gusto DEMACIADO desde la primera vez que lo hizo. Zuma reconoció que el olor es de un perro pero no esta seguro, es demasiado apestoso, mucho mas que un zorrillo o un oso.
El perro voltea a ver de donde viene esa terrible peste y no puede creer lo que ve saliendo con algo de dificultad de la gran puerta.
Es Rocky, el tercer cachorro y el mas joven de ellos, ahora que lo ve a cuerpo completo, se da cuenta de porque no estaba por completo en el poster, es enorme sobre todo su trasero. Es un perro de 2 metros alto, de 3 años perrunos, de pelaje gris con una mancha gris oscura al rededor de su ojo izquierdo, unos grandes ojos cafés, una gorra verde con blanco al frente y con el dibujo de la pata de la Paw Patrol, un chaleco verde con un cinturón azul en su cintura y recalco, su culo es enorme, casi tocando el techo con su larga cola moviéndose de un lado otro esparciendo el fétido olor que sale de su trasero. A simple vista su especie no se puede definir del todo, es posiblemente una mezcla de schnauzer con terrier escocés o de border collie con pastor australiano.
A Rocky le esta costando un poco pasar por la puerta de 3 metros de alto y 4 de ancho, su culo no pasa de lo grande que es, por lo que hace fuerza para pasar mientras se tira varios pedos involuntariamente por el esfuerzo, pedos tan potentes que por la fuerza del viento, lo empujan hacia delante hasta que logra pasar por la puerta dejándola aboyada. Doblo una puertas de metal solo con su trasero y sus gases, así de fuertes son.
Rocky: perdón, no savia que había que había alguien aquí. Se me salieron.
Aunque lo hubiera sabido, no los podría aguantar. Pero... si Rocky pudiera aguantar sus gases, no lo haría ya que le gusta mucho tirarlos.
Rocky va caminando soltando un pedo con cada paso hasta llegar al sofá. El ano de Rocky es muy flojo, tan solo la fuerza por levantar algo un es suficiente para hacerlo tirar muchos gases, simplemente caminar lo hace tirarse "pequeños" pedos como si nada (pequeños para el, pero para cualquiera que este detrás de el diría que son una tormenta).
Zuma: no te preocupes.
Rocky: vine a ver la tele ¿Puedo sentarme contigo?
Zuma: claro. Aunque no creo que los 2 quepamos aquí.
Rocky no escucho lo segundo y da media vuelta mostrándole su culo directamente a Zuma. Es una vista hermosa, 2 enormes nalgas perfectas que se ven suaves y apretables, agitándose pese a que Rocky se quedo quieto, el dar media vuelta fue suficiente para menear sus nalgas. La peste que emana es tan densa que incluso se puede ver ligeramente, una nube de gas que sale directo del medio del trasero del cachorro que se puede notar si prestas suficiente atención. Su cola apenas se puede ver desde atrás y por la sorpresa Zuma no se da cuenta de que hay una correa de perro saliendo de la parte de abajo. 
Rocky: te aceptaron en la Paw Patrol verdad?
Luego de decir eso, Rocky deja su pesado y suave culo bajar sentándose con varios gases saliendo por la ligera presión haciendo un ligero ruido de crujido en el sofá el cual no se puede escuchar por las flatulencias.
Zuma: si, estoy esperando a que terminen las entrevistas.
Rocky: oh, se suponía que debías ir al quinto piso, este es el sexto.
Zuma: en serio?
Rocky: si, pero luego les aviso que te busquen aquí, por ahora veamos tele.
Zuma: me parece bien *zuma toma el control*  que quieres ver?
Rocky dice emocionado: pon Jetix!
Durante un buen tiempo los 2 perros hablaron y se entretuvieron viendo tele como buenos amigos. Una bonita relación que esta esta comenzando en un ambiente que para muchos seria pesado, pero hay "algo" en el aire que se podría decir incluso romántico para Zuma. 
En un momento el estomago de Rocky suena por el hambre.
Zuma: oye, te gustaría que te traiga algo de comida?
Rocky: por supuesto, hay unos botes de helado, sodas y chocolates en el refri.
Zuma se levanta y dice: eso es mucho, eres un cachorro muy hambriento.
Zuma abre el refri y le trae su comida a Rocky en 2 viajes.
Rocky: nah, esto solo es solo un pequeño bocadillo.
Rocky empieza a comer sin control como cualquier otro cachorro lo haría, es lindo verlo relamiéndose las patas metiéndoselas enteras en la boca. Rocky no deja nada, ni siquiera parece que hubo comida alguna.
Rocky: muchas gracias, adoro comer.
Zuma: como es que estas en forma con todo eso?
Rocky: no se, creo que todo se me va a las caderas.
"No solo las caderas" piensa Zuma mirando el culo de Rocky quien esta distraído con la tele.
Luego de que terminan los dibujos animados Rocky mira algo triste el reloj y se prepara para levantarse.
Rocky: ya me tengo que ir.
Zuma: que mal, me gusto mucho estar contigo.
El cachorro se levanta dejando salir una nube densa de debajo de su trasero, todo el gas de sus pedos se había concentrado en el espacio entre su ano y el asiento que salía muy poco a poco por los lados lo que causo que esa nube tuviera un olor mucho mas pútrido. Una vez parado, Rocky apunta su enorme trasero hacia Zuma a la vez que deja salir involuntariamente otro gas.
Rocky: igualmente, fue un placer conocerte.
Esa ultima palabra hizo que la Zuma se llenara de alegría pues, como muchos ya sabemos, los perros se olfatean el trasero cuando se conocen. Por eso Rocky se puso en esa adorable posición. 
Zuma se para en el sofá y nerviosamente por la emoción pone su nariz de inmediato entre las apestosas nalgas de Rocky sin pensarlo ni un segundo empezando a olfatear con su pene apenas empezando a ponerse duro. El olor es mucho mas fuerte de lo que Zuma esperaba, recibió un golpe directo a sus pulmones cansándole una sensación increíble pese. El echo de no estar preparado para tal impacto tan potente parece que hizo mejorar la experiencia que muy pocos han podido tener ya que por lo general los otros perros caen noqueados a este punto. 
Rocky: que tal si mañana vamos a jugar al parque y después comemos en el restaurante de al lado?.
Zuma responde pero lo esponjoso y suave del culo del cachorro mitiga el sonido lo que Rocky siente como la boca de Zuma moviéndose ahí atrás.
Rocky: o cierto, bueno, cuando termines me dices.
Zuma se toma su tiempo para oler el mejor trasero que ha tenido a su frente en toda su vida y con una abisal diferencia tan grande como el trasero en si. Rocky espera tranquilo y feliz, esto es normal para el y por mucho que Zuma ya lleve mas de 10 minutos oliendo cada centímetro de su fétido culo, su inocencia le impide pensar que algo esta fuera de lugar soltando mas gases de vez en cuanto de nuevo tienen una peste que supera por mucho las expectativas de Zuma.
Zuma pone ambas manos a los lados del gran muro que forman las nalgas de Rocky y se empuja para salir de esa trampa toxica de la que se necesita mucha voluntad y concentración para abandonar por voluntad propia ya que admitámoslo, tu el lector, no sacarías tu cabeza de ahí ni por dinero. Al estar a fuera Zuma se dio cuenta de que su cara quedo llena del sudor de Rocky, provocado por el propio calor de sus ardientes pedos.
Zuma: me parece una buena idea. Seria genial conocerte aun mas.
Zuma da media vuelta, ahora es turno de Rocky quien no demora mucho y luego dice: genial, nos vemos a las 8. 
Rocky se acerca a Zuma y frota su cabeza con la de el cariñosamente, se va caminando al elevador dejando su rastro de olor a su paso, se despide y presiona el botón del elevador.
Zuma inmediatamente y como si su vida dependiera de ello se abalanza sobre el asiento donde se sentó Rocky y hunde su cabeza en el inhalando lo mas profundo que puede la peste que dejo Rocky. Haciendo eso se dio cuenta que donde que a Rocky que en algún momento se le cayo un par de juguetes para perros  ¿pero donde los guardaba si no tenia bolsillos?. 
El tiempo pasa con Zuma enloquecido por el olor en la habitación, simplemente quedo enamorado por la inocencia, alegría y dulzura del cachorro, el tamaño de su retaguardia y el hedor que emana. El elevador vuelve a sonar por lo que suma un poco asustado se vuelve a acostar en el sota como estaba antes.
Chase: uffff huele eso, Rocky estuvo aquí.
Marshall: pues si, el mismo nos lo dijo.
Ambos perros recibieron el fuerte golpe del clima interno de la habitación, Marshall encantado y mareado por el olor, el quisiera olfatear la peste Rocky directamente pero no es capas de aguantarlo, incluso abecés apenas puede con Chase. Y Chase, con una combinación de placer por el fuerte olor y celos, pues el quisiera ser tan apestoso como Rocky.
Marshall inhala profundo resistiendo toser y dice: algún día tenemos que hacer otro trio con el.
Chase: trio? los 2 caímos cuando Rocky empezó con su cuarta tormenta de gases.
Marshall responde un poco apenado: en realidad yo caí a la mitad de la tercera.
Ambos entran con Zuma quien logro bajar el comienzo de su erección apenas a tiempo.
Marshall: ya terminamos las entrevistas, fue mas largo de lo que esperaba.
Chase: al final fuiste el único que aprobó la sección física por lo que podemos prescindir de lo otro por ahora.
Zuma: no se si eso es bueno o no, pero bueno, es genial ser parte del grupo ¿por casualidad puedo empezar con Rocky?
Ambos perros se sorprenden un poco y se meran el uno al otro un tanto confundidos.
Chase: seguro que quieres ir con el?
Marshall: puede ser bastante problemático. 
Zuma: por su puesto, me encanto conocerlo ahora que vino.
Marshall: esta bien, aunque tu eres salvavidas si no me equivoco. A Rocky le da algo de miedo el agua.
Zuma: oh, no hay problema, no lo voy mojar mucho jaja.
Chase: ja, bueno, vamos abajo para enseñarte todo lo que necesitas.
Los 3 bajan dejando la habitación llena del gas nocivo disipándose y así empieza la vida de Zuma en la Paw Patrol salvando muchas personas, viviendo momentos increíbles, alegrías, tristezas y su gran amor por su compañero de dudosa legalidad. Por suerte los perros no tienen problema con las relaciones con cachorros.