Por fin llegaron las vacaciones, es momento de olvidar tu trabajo y pasar un buen día en la playa. Tomas tus cosas, llamas un taxi y en casi una hora llegas a un hermoso y soleado día de relajación en la arena, nadar un rato y tal vez surfear si el mar está para ello. No hay mucha gente, así que puedes ponerte donde quieras. A la distancia ves un lugar perfecto cerca de la caseta del salvavidas.Pones tu manta, tu sombrilla, te acuestas bajo la sombra viendo al horizonte y descansas admirando la vista. Un tiempo después, escuchas pisadas acercándose a tu lado, alguien te saluda y al voltear tienes una vista bastante interesante. Vez a Nick Wilde, de cuclillas observando tu cuerpo de pies a cabeza, cubierto de sudor que lo hace relucir, usando nada más que unos tacones un collar, una muy fina tanga unida a su collar y stickers de pezones, todo verde y muy revelador. Incluso inclinando lo suficiente para que puedas ver su ano y sus partes sin mucho problema, cosa que en cualquier otra posición sería difícil gracias a su gran trasero y muslos. Nick: Hola amigo, desde hace rato note que tienes un buen bulto en tu bañador. Me encantaría probarlo. La apariencia y palabras del zorro te dejan sin palabras. Pero antes de que pudieras reaccionar, Nick pasó su pierna sobre ti y se inclinó lo suficiente para poder sentir su respiración. Nick: Vamos, no se ven machos tan atractivos como tu tan seguido, y menos uno tan dotado. Repentinamente, Nick se sienta y puedes sentir el peso de sus gordas nalgas, las cuales frota de arriba abajo sobre tu bulto que rápidamente ajusta más tu bañador. Nick: Es más grande de lo que pensaba. Di que si por favor, la necesito… Conozco a la salva vidas, esa conejita hará la vista gorda si nos atrapa. El zorro se hace un poco para atar y con su garra baja lo que llevabas puesto finalmente sacando tu miembro. No opones resistencia alguna, Nick ya se dio cuenta que le darás vía libre. Nick: Aunque sera difícil que no vea algo tan grande, grueso y venoso. No puedo esperar mas. Babeando por la vista, Nick se corre hacia un lado lo poco que tenía tapándolo y sin lubricar o prepararse empieza a dar sentones sin parar. Puedes sentir el suave trasero golpeando incluso contra tus muslos gracias a lo grande que es. Notas en la cara de Nick como lo que tienes es más de lo que está acostumbrado, mordiéndose los labios con la mirada casi en blanco. Pero eso no lo hace bajar el ritmo, al contrario, cada vez te monta de una forma más y más ruda. Poco después, lo empiezas a escuchar gimiendo entre jadeos y de repente algo cálido y viscoso cae en tu cara. Hiciste que Nick llegara al orgasmo, sin siquiera haberse tocado nada, continúa dando sentones mientras dispara sobre ti, la manta e incluso alcanzando el palo de la sombrilla. Luego de un rato, Nick da un fuerte sentón quédense sentado, apretando los dientes con una mirada bastante complacida mientras vuelve a tener otro orgasmo sobre ti. Mas sentones vinieron y el tiempo pasó como si nada. Nick tiene bastante energía que usa por completo para montarte sin parar por lo que crees fue una hora completa. Finalmente, sorprendes a Nick tomándolo por sus caderas y lo bajas con fuerza al mismo tiempo que subes tus caderas. Los empujones y sentones hacen que los 2 terminan al mismo tiempo descargando todo los que tenían. Puedes ver como el estómago de Nick se infla un poco al mismo tiempo que sientes como se desborda y chorrea sobre ti, al mismo tiempo que Nick te vuelve a cubrir gimiendo mas fuerte que antes. Los 2 quedan agotados, Nick se deja caer a tu lado, donde queda acostado de lado con el semen regándose como una cascada sobre el borde de la manta y terminando en la arena. Nick: Eso fue increíble ¿Crees que puedas darme una segunda ronda? Cuando tenga espacio claro, me llenaste bastante. Mientras tanto ve apuntando mi número, oh y además… Tu expresión de satisfacción cambia al escuchar lo que está diciendo, sueltas una pequeña risa nerviosa pensando que ahora te tocará ser el semental de este zorro. Aunque tampoco le estas diciendo que no.