Empezó el día para uno de los muchos pikachus del bosque. Sin embargo, este destaca por algo bastante evidente, y es por sus partes gigantescas. Un pene venoso y palpitante que sin falta despierta erecto todos los días, y unas jugosas bolas peludas con marcas de rayo. Cuando este pikachu despierta, todos salen huyendo, saben que quien se cruce en su camino será obligado a almacenar todo lo que tiene dentro de esas grandes bolas. No muy lejos, un madrugador entrenador se encontraba en su primera aventura. Un pequeño conejo llamado Lemmy. Pelaje café, ojos, pelo y nariz negros, orejas largas, una camisa naranja y unos shorts que apenas cubren la mitad de su enorme culo, mostrando su ropa interior. Este joven entrenador solo tenía un pokemon, un buneary que le regaló su vecino justo el día de hoy. El sonido del trasero del conejo llamó la atención del pikachu, quien no tardó en encontrarlo guiándose por el ruido. Durante un buen rato, estuvo siguiendo a Lemmy por detrás, escondido en los arbustos marturbándose constantemente mientras observaba su enorme trasero. Dejó varios arbustos y árboles cubiertos de semen como si los hubieran rociado con una manguera. Cuando el conejo se detuvo a hacer una fogata para hacer su desayuno, el pikachu aprovechó el momento para finalmente lanzarse sobre. Corrió directo a su boca y de un solo empujón metió su miembro hasta el fondo, con su pene hacia atrás como perro, estirando la boca, garganta y estómago de Lemmy. Este no pudo oponer resistencia alguna, solo cayó al suelo al no poder soportar con sus piernas el gran peso del pene y bolas del roedor. Los empujones se escuchaban entre los árboles, Lemmy ha sido paralizado por la estática que produce por la fricción de sus bolas chocando contra el pelaje de la cara de Lemmy. No tardó mucho en llegar al primer orgasmo dentro de su nuevo barril de semen. El estómago de Lemmy se infló pero el pikachu siguió embistiendo. Tanto líquido dentro del conejo se empezó a desbordar por detrás, mojando su ropita interior y pantalón. Cuando llega su próximo orgasmo, El pikachu se acomoda apuntando su pene más abajo, lo que hace se al dar el empujón que suelta el chorro, su miembro sale por el culo de Lemmy. Al hacer esto, rompe ambas prendas del conejo, dejando su culo completamente expuesto con nada mas que el miembro amarillo saliendo del medio para “cubrirlo”. En esa posición, todo el semen sale disparado hacia el bosque. El pikachu saca su pene al terminar y rodea a Lemmy para ir a su trasero. Ahora se puede escuchar una especie de jadeo de parte del conejo que suena más al semen chorreando por su boca abierta. Al hacer esto, los choques en su cuerpo hacen que la pokebola que tenía en su pantalón roto callera. El buneary sale listo para pelear al escuchar a su entrenador siendo atacado. No obstante, cuando volteo y vio la escena, su pene se puso erecto de inmediato, con tamaño de 2 metros, el mismo que el del pikachu. Ni siquiera intentó resistirse, se unió al uso de los agujeros de su entrenador sin dudar metiendo su enorme pene por la boca ya lubricada. Ahora tiene dos machos dentro de él al mismo tiempo y nadie que lo ayude a salir de ahí. No se detienen por nada, ambos siguen penetrando a Lemmy hasta llegar al orgasmo, inflándolo todavía más. Pikachu sigue usando ese gordo culo y buneary quiere probarlo también. Igual que su nuevo compañero, buneary va detrás del conejo y mete su pene hasta el fondo. Se pueden ver los 2 bultos marcando su forma en el estómago de Lemmy. Orgasmo tras orgasmo siguieron llenando a Lemmy hasta el punto que su estómago tiene el tamaño de una familia de snorlax, variando entre su boca y su culo pero sobre todo usando su gran trasero. Pasadas unas horas, el pikachu saco su pene, que para este punto ya está completamente cubierto de semen, y lo coloca entre las nalgas del conejo. Buneary no voltea a ver, sigue concentrado en dar empujones a su entrenador. Pikachu se vuelve a masturbar y su órgano se dispara en la cabeza y cuerpo de Lemmy, salpicando por todos lados que hasta apaga la fogata con el líquido espeso. Ahora está lleno de semen por dentro y por fuera. El pikachu se baja un segundo para tomar la mochila de Lemmy, la única cosa que no ha sido cubierta en semen. Se la pone, vuelve a subir, vuelve a meter el miembro hasta el fondo, pone su brazo sobre el hombro del buneary quien lo sigue poniendo el suyo sobre el hombro de pikachu sin saber qué es lo que quiere, y se hace para atrás llevando a ambos al pararse en el suelo. Cargando a Lemmy y todos los litros de semen dentro de él que chorrean por ambos lados como fuentes abiertas, empiezan a caminar, empezando una aventura de 2 grandes amigos que se conocieron gracias a su barril de semen personal que tardó varios meses en dejarlos finalmente vacíos y finalmente tener un descanso de constantes orgasmos día y noche… Descanso que solo duró unas semanas pues caminando por ahí, su enorme culo atrajo la atención de un Greninja igual de dotado quien se convertiría en su tercer pokemon.