CAPITULO 1 El sol se imponía reluciente sobre el cielo azul,totalmente despejado.Los girasoles eran más altos que ella,haciendo que todo alrededor estuviera de un resplandeciente tono soleado.El suelo era puro césped de color verde que rodeaba todos los girasoles.La temperatura era cálida,pero tampoco hacía demasiado calor. Se dice que cuando una nación nade debe esperar minutos,tal vez horas hata que otra nación mayor la encuentre y cuide de ella.Si en algún caso no llega nadie,dicha nación debe intentar valerse por sí misma crecer lo máximo que pueda. Llevar un país adelante no es fácil.Los primero años solo piensas en aprender y entender lo que hay a tu alrededor.No entiendes,ni te interesan las conferencia,ni políticas.Mediante vas creciendo,vas entendiento y te vas preocupando más por tu país.Eso si creces... Llevaba horas esperando y no llegaba nadie,decidió que había esperado lo suficiente y se levantó.A pesar de haberse puesto en pie,los girasoles seguían siendo muy altos...¿o era ella la pequeña? Empezó a caminar y a caminar.No tenía una dirección fija,simplemente,salir de allí.Cuando consiguió salir del campo de girasoles,pudo ver un extenso prado verde,donde a lo lejor,podía ver una pequeña ¿o gran? ciudad. "¿Este es mi país?" pensó la pequeña con una sonrisa "¡Es muy bonito!".Miró detrás suya.¿Qué habría detrás del campo de girasoles? Podría,simplemente,rodearlo y mirar,pero le parecía más emocionante cruzarlo. Cuanto terminó el trayecto,vió unos metros de llanura que en cierto punto terminaba.¿Qué era aquello? Donde terminaba la llanura empezaba un bosque repleto de algo blanco y con unos árboles sin hojas.¿Blanco? ¡Que interesante! ¿Qué podía ser? Poco a poco se fue acercando."Solo me queda un paso para cruzar" pensó emocionada.Pegó un saltito y en cuanto sus pies,que tenían sandalias,tocaron aquello,un frío la recorrió por todas partes,no solo por aquello,que al parecer estaba helado,también porque un viento gélido la azotó dejandola fría. Después de tener un estremecimiento demasiado grande,pegó otro saltito volviendo a donde se encontraba.La calidez de su país la envolvió quitandole el desolado frío que sintió hace un momento.¿Sería eso otro país? Era muy distinto al suyo... Cogió aquello con las manos."Nieve" pensó.En cuantó lo agarró,lo sintió frío,muy frío y el calor de su nación lo fue derritiendo poco a poco hasta convertirlo en agua que cayó en la hierba espesa bajo sus pies.Miró sus ropas,tenía un pequeño vestido amarillo que si lo veías de cerca podías observar pequeños girasoles dibujados.El vestido le llegaba hasta las rodillas y no tenía mangas.Su pelo era castaño y sus ojos verdes. "No me extraña qe tuviera frío,voy vestida de verano..." Miró hacia el otro país.La densidad del bosque no dejaba ver más alla y vió que empezaba a nevar de una manera lenta.Ella quería saber que había al otro lado.Asintió decidida.Se aguantaría el frío y cruzaría. Cruzó la frontera sintiendo,de nuevo,un gran estremecimiento,pero esta vez no retrocedió,si no que siguió andando.Intentó calentarse con las manos mientras se adentraba. Llevaba un buen rato caminando hasta llegar al final de ese extenso bosque.Miró al cielo,"Gris" pensó "Este lugar es muy...solitario".Un gran prado de nieve se extendía y a lo lejos vió una gran ciudad.Decidió ir. Costaba caminar en la nieve,pero en un rato llegaría.Se estaba muriendo de frío.De pronto,topó con algo en el suelo."¿Una bufanda?" Había una bufanda enganchada en una rama seca en el suelo,gracias a eso el viento no se lo ha había llevado. La cogió con cuidado.Era muy grande,debía de ser de una persona mayor a ella.Se la puso alrededor del cuello.Estaba calentita,debió de haberse perdido hace poco.Olía a sus preciados girasoles.Esta persona ya le estaba cayendo bien.También,un poco a vodka.Las dos cosas unidas formaban un aroma muy dulce."Al menos así no tengo frío". Al poco rato,llegó a la ciudad.Era enorme y había mucha gente.La mayoría la miraba extrañada sin reconocerla,viendo que era extranjera por las ropas de verano que llevaba. Aquel lugar era maravilloso.Todo el mundo vestía abrigos enormes y todos eran muy altos.De pronto,vió un gran cúmulo de gente reunida y se acercó para observar.Vió a un gran grupo de hombres saltando al son de una canción llamada "Kalinka".La canción era muy bonita y divertida,mientras que los hombres saltaban haciendo piruetas y las chicas empezaban a girar haciendo que sus faldas volaran. El baile terminó mientras todos aplaudían.Aquello le había gustado mucho.Feliz,dió la vuelta chocando con las piernas de alguien. -¡Oh! Lo siento...-susurró ella,hablando por primera vez.Sintió su voz dulce y suave. -No pasa nada,da~.-escuchó decir una voz que parecía la de un niño,pero al mismo tiempo denotaba un toque de madurez. Alzó la vista observando a un hombre bastante alto,con un gran abrigo y unas grandes botas.Su pelo era plateado y sus ojos violetas.En su rostro había una gran sonrisa que,al igual que su voz,era la de un niño.De pronto,vió que esa sonrisa cambiaba por una de sorpresa.Parecía mirar la bufanda. -Veio que has encontrado mi bufanda,da~.-Miró la bufanda y lo miró a él. -¿Es suya?-le preguntó.El asintió. -¡Da!-dijo alegre.Ella se la quitó y se la tendió,mientras el la cogía y se la ponía lentamente. -Gracias.-dijo lanzando una risita que a ella le pareció muy graciosa.-También eres un pais por lo que veo ¿da? Ella se sorprendió. -¿Usted es un país?-le dijo. -Lo estas pisando ahora mismo,da~. -Pues es usted muy alto.-contestó.El desconocido no pudo evitar reir.Se puso en cuclillas hasta quedar a la misma altura de la pequeña. -¿Así mejor,da?-ella asintió.-Permiteme presentarme.Yo soy la Gran Rusia y mi nombre humano es Iván Braginski.Mi país,como ves,es un lugar muy frío dirigido por el General Invierno y mi suministro es el vodka.-terminó ensanchando su sonrisa. -Pues...-empezó a decir la pequeña nerviosa-yo soy Dorayan y mi nombre humano es Sey.Mi país es muy cálido y hay montones de girasoles.Mi sueño es llegar a crecer tanto como Iván. Iván ante aquello rió. -¿Cuál es su sueño?-preguntó la pequeña.Iván se sorprendió por la pregunta,pero después volvió a sonreir y respondió. -Que todos sean uno con Rusia,da. Sey no sabía si se lo había imaginado,pero le pareció ver una extraña aura violeta detrás de Iván al decir aquella frase. -¿Cómo perdió su bufanda?-Rusia la miró mostrandole sus ojos violetas. -¿En serio quieres saberlo,Sey?-la pequeña asintió.-Esta bufanda me la dio mi nee-san,Ucrania.Es muy preciada para mi y se la llevó el viento mientras huía de mi nee-chan,Bielorrusia.Podríamos decir...que me quiere demasiado. Hubo una pequeña pausa. -¿Sabes que me gustan mucho los girasoles,da?